Bueno, comenzaré por compartir un debate psico-emocional con el que hoy me he topado mientras divagaba por mi mente de camino a casa, esto de ir en el bus tiene sus pros y contras, te dá al menos tiempo para pensar en cosas que habitualmente no te detendrias a analizar.
Observando a la gente, su comportamiento, sus reacciones, sus miradas, aprendes a descifrar ese lenguaje que habla unas veces de empatía y humanidad y otras muchas de pasotismo y frialdad.
La primera cuestión que me hago es, ¿Por qué la gente cuando llueve y va con paraguas no te cede el paso de la zona bajo los balcones viendo que tu no tienes y no hallas donde resguardarte?, no sé, si yo veo que alguien no tiene un paraguas y yo si, pues me aparto hacia la zona exterior de la acera para no hacer que se moje mas.
Otra pregunta es, ¿Por qué la gente pregunta con gran simpatía "¿Como estás?" cuando coincide contigo en el mercado o una esquina de la calle, para acto seguido y sin dejarte opción a respuesta, comenzar a hablar con un ataque psicótico de verborrea, sobre ellos , ellos y más ellos.
Uhmmmm, y que me dicen de los que se te pegan a los talones caminando por la calle y solamente emiten un sonido gutural asi como gusdhidhnkjhdk, para que te percates que quieren pasar y adelantarte, en vez de pedir paso por favor, y cuando lo logran todavía se van mascullando un...." Vamos queeeee, van ocupando toda la calle". ¿No sería más sencillo hablar y ya?, digo yo, porque ellos lleven prisa yo no he de llevarla.
Algo que también me perturba el karma es no saber el por qué la gente dedica el triple o cuádruple de tiempo a hablar de cosas negativas, dolencias, tristes vivencias, catástrofes, etc, que a hablar de cosas bellas, como contarte cuando y cuanto han reído, lo bien que se sienten al hacer alguna cosa, lo mucho que han disfrutado de una película o reunión o del sexo, en fin, yo diría que hay gente dramática por naturaleza, de esas que directamente sufren contínuos orgasmos con el simple hecho de regocijarse en sus propias desgracias, al mas puro estilo novelesco.
En fin, seguro que si continúo dándole taller y coco al asunto termino igual de neurótica que aquellos que viendo un film gritan y le piden a los protagonistas que actúen como ellos lo harían en esa situación...
Aunque pensándolo mejor, continuará jajajaja.....
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